Un comunicador de Rosario de la Frontera denunció que fue golpeado por policías

Oscar Ramirez, lleva adelante en Rosario de la Frontera, tareas de comunicación que canaliza a través de redes sociales sobre distintos hechos que registra en el lugar. Días atrás, se trasladó a nuestra ciudad para realizar una denuncia por abuso de autoridad por parte de efectivos de la Policía de la Provincia que lo detuvieron y asegura que lo golpearon, además de destruirle el teléfono en el que había grabado a un policía apuntando con un arma a un hombre que defendía a su madre en medio de un forcejeo.

En la denuncia realizada en nuestra ciudad, Ramirez señala que tras recibir un llamado de una persona que estaba siendo desalojada en la calle Benjamín Zorrilla de Villa Manuela en Rosario de la Frontera, llega al lugar por interés periodístico. Aseguró que observó a personal policial y una mujer con sus hijos y muebles afuera del domicilio.

Aparentemente vecinos habían desalojado a la fuerza a esta familia, pero una mujer policía que hablaba por teléfono, habría recibido instrucciones de hacer ingresar nuevamente a la mujer al domicilio, por lo que rompieron la puerta para ingresar, aunque los muebles quedaron afuera. A los minutos, Ramirez fue a denunciar que escuchó a la mujer policía dirigirse en términos denigrante a la mujer desalojada con sus hijos, pero no le tomaron la denuncia ni en la comisaría ni en la sub comisaría El Mirador.

Durante la noche, se acerca al mismo domicilio donde había una quema de neumáticos y observa que había un forcejeo entre la mujer que habían desalojado anteriormente y un policía. En el instante se acercó el hijo de esta mujer para separar al efectivo el que logró tirar al suelo al hombre y, según asegura Ramirez, le apuntó con su arma amenazándolo de muerte. Cuando Ramirez se acercó a consultar donde ubicar al jefe de del operativo, asegura que el mismo policía lo empujó contra el móvil y lo redujeron colocándole las esposas para luego ingresarlo a la caja del patrullero.

Ramirez aseguró que fue golpeado por los policías y el teléfono celular con el que grabó el incidente anterior cayó en medio del operativo para que uno de los efectivos lo pisó varias veces hasta destruirlo. Posteriormente lo llevaron hacia el hospital donde un médico lo revisó y luego lo trasladaron a un calabozo en la comisaría.

Al momento de salir, Ramirez señala que le notificaron la prohibición de acercarse al personal que realiza los procedimientos y en la denuncia asegura que le dijeron: "acá nunca llegaste con celular, mandate a mudar".

Cabe acotar que al retirarse el móvil que trasladaba a Ramirez, impactó contra un automóvil estacionado en el lugar.