
Darío Pellegrini, presidente de la Cámara de PYMES de Salta, advirtió que las empresas sobreviven ajustando costos y con esfuerzo propio. Reclaman alivio fiscal urgente.
A partir del próximo sábado, con el inicio del mes de junio, habrá un nuevo golpe al bolsillo cuando se traslade a precios el impuesto a los combustibles que subió por decreto el gobierno de Javier Milei. El litro de nafta tendrá un incremento aproximado de 20%.
El 1 de junio vence la prórroga del mencionado tributo, y el Poder Ejecutivo tenía que decidir si continuaba con el congelamiento dispuesto a fines de abril o si volvía a actualizarlo de acuerdo a la inflación.
El argumento que utilizó el Ministerio de Economía para postergar el incremento al Impuesto a la Transferencia de Combustibles Líquidos (ICL) tenía que ver con “estimular el crecimiento garantizando un sendero fiscal sostenible”.
Sin embargo, ahora la cartera a cargo de Luis Caputo dispuso la actualización del tributo que tendrá un trasladado a la nafta y el gasoil en surtidores -de YPF, Shell, Axion y Puma Energy- con efectos en la inflación.
Darío Pellegrini, presidente de la Cámara de PYMES de Salta, advirtió que las empresas sobreviven ajustando costos y con esfuerzo propio. Reclaman alivio fiscal urgente.
Guillermo Borelli, representante del Sindicato de Trabajadores Petroleros de Córdoba, criticó duramente la política de precios en el país.
El viceministro de Economía dijo que el rojo del balance de pagos será del 2% del PBI. Es por el auge de viajes al exterior y las importaciones. “Tenemos tiempo para acumular reservas”, dijo por su parte el vice del BCRA.
El Índice de Precios al Consumidor (IPC) mensual mostró una desaceleración de 1,3 puntos contra marzo. En los últimos 12 meses sumó 43,5%.
La misma habría quebrado el 2%, exhibiendo una nueva desaceleración respecto a la medición previa.
El Gobierno dispuso que no se aplicará la percepción del IVA a operaciones de hasta $10 millones dirigidas a consumidores finales. Apunta a simplificar el sistema y reducir conflictos.