
Fue un discurso escrito, a diferencia de sus predecesores, y en el que también habló en español. “Debemos buscar juntos ser una iglesia misionera, una iglesia que construye puentes y el diálogo siempre abiertos a recibir a todos", dijo.
Tras la fumata negra de esta tarde, los cardenales se retiran a Santa Marta y al Colegio Etíope. El cónclave continuará mañana y comenzará a las 7.30 con una misa. Después los electores rezarán el laudes en la Capilla Sixtina, antes de dar comienzo a la primera votación. En este caso, solo habrá fumata si alcanzan un acuerdo, es decir, si es blanca. Si no, se procederá inmediatamente a una segunda votación, tras la cual se quemarán las papeletas de los dos procesos, dando paso a una fumata a partir de mediodía.
El proceso se repetirá a partir de las 16.00 si no ha resultado elegido ningún cardenal para suceder a Francisco. Si se alcanzara un acuerdo en la primera votación, se espera la fumata a media tarde. Si no, partir de las 19.00. Si tampoco hubiera acuerdo, los electores se retirarían de nuevo a sus residencias tras rezar.
Si resultara elegido un papa, sonarían las seis campanas de la basílica de San Pedro y, tras el anuncio del Habemus papam en el balcón que da a la plaza homónima, se daría a conocer el nombre del pontífice. Poco después, este se presentaría ante los fieles en ese mismo balcón y concedería la bendición Urbi et Orbi.
Fue un discurso escrito, a diferencia de sus predecesores, y en el que también habló en español. “Debemos buscar juntos ser una iglesia misionera, una iglesia que construye puentes y el diálogo siempre abiertos a recibir a todos", dijo.
La elección continuará por la tarde con un máximo de dos votaciones. Ninguno de los cardenales consiguió los dos tercios de los votos.
La elección del sucesor del fallecido papa Francisco comenzó este miércoles según marca la constitución apostólica Universi Dominici Gregis.
Es el primer candidato oficial a Papa anunciado el miércoles en el marco de las congregaciones, deliberaciones y encuentros de los cardenales. La iniciativa fue de monseñor Jean-Claude Hollerich, arzobispo de Luxemburgo y uno de los colaboradores de fierro del Papa Bergoglio.
El 7 de mayo comienza el cónclave. De la chimenea saldrá humo negro si no se eligió al nuevo Papa, o blanco si fue elegido.